
Incentivos fiscales de Estados Unidos sacuden la estrategia de relocalización industrial en México
La aprobación de la ley fiscal promovida por Donald Trump —pendiente ya sólo de su firma— establece ventajas tributarias para que las empresas mantengan su producción en territorio estadounidense. El movimiento amenaza directamente la apuesta de nearshoring que ha impulsado el crecimiento en México durante los últimos años, especialmente en los estados fronterizos.
Antecedentes de la reforma
Bajada del impuesto corporativo al 21 %
El nuevo paquete fiscal reduce de forma permanente la carga impositiva para las grandes compañías estadounidenses y elimina la propuesta global del 15 % avalada por el G7. El objetivo es repatriar líneas de producción, reforzando la competitividad doméstica y contrarrestando la mano de obra barata en el extranjero.
Impacto potencial en el nearshoring
Miles de empleos en la cuerda floja
México había capitalizado la tendencia de relocalización con más de 100 000 millones de dólares en proyectos anunciados entre 2023 y 2025. Sectores como automotriz, electrónica y dispositivos médicos podrían replantear sus planes si la ventaja fiscal norteamericana supera el diferencial de costos laborales y logísticos.
Reacciones oficiales y empresariales
Ebrard mantiene la calma
El secretario de Economía, Marcelo Ebrard, afirmó que “los costos de producción y la infraestructura logística de México siguen siendo competitivos”. Sin embargo, analistas advierten que los incentivos de EE. UU. podrían acelerar la migración de inversiones hacia estados del sur estadounidense, donde además comparten jurisdicción y estabilidad normativa.
Escenarios fiscales para México
¿Carrera a la baja?
Expertos como Carlos Brown, de Oxfam México, advierten que el país carece de margen para igualar la rebaja fiscal debido a un déficit que ronda el 4 % del PIB. Una alternativa sería duplicar los estímulos en la frontera norte, estrategia aplicada en 2017, pero su efecto puede diluirse frente a los atractivos fiscales estadounidenses.
El papel del TMEC y la cadena de valor
Renegociación pendiente
La revisión del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (TMEC) prevista para 2026 añade incertidumbre. Especialistas aseguran que reglas de origen más estrictas o ajustes arancelarios podrían encarecer la producción mexicana, reduciendo las ventajas del nearshoring.
Perspectivas de mediano plazo
Diversificación y valor agregado
Aun con un escenario adverso, México conserva fortalezas: mano de obra especializada, proximidad geográfica y clústeres consolidados. La diversificación de mercados —particularmente en América Latina y Europa— y la incorporación de nearshoring de servicios digitales emergen como estrategias para amortiguar el golpe.
«Estados Unidos todavía no será autosuficiente en varios sectores; México debe concentrarse en sofisticar su oferta y asegurar certeza regulatoria» — Janneth Quiroz, directora de Análisis en Monex